Autobiografía

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por Valentina Godoy

He querido estudiar muchas carreras universitarias. En cuarto medio, llegué a pensar que podría ser veterinaria, filósofa o cineasta. Me decidí por periodismo a última hora, como todas mis decisiones. Soy bastante indecisa.

Tengo 5 hermanos. Algunos de padres o madres diferentes. He vivido en muchas comunas y estudiado en muchos colegios. Actualmente vivo en Ñuñoa, cerca de mi universidad, por eso siempre llego tarde a las clases. Sé manejar pero no tengo licencia, porque prefiero la bicicleta y sus buenas intenciones. Vivo con mi padre y con dos de mis hermanos. Mi madre falleció de cáncer cuando yo tenía 16.

Nací en Santiago de Chile, aunque me hubiese gustado nacer en Valparaíso o Viña del mar como mis hermanos. Mis padres habían programado mi nacimiento para el día catorce de febrero, la famosa fecha de los enamorados y por cierto, mi santo. Pero me atrasé un día y nací el quince. No me gusta estar de cumpleaños.

En mi reproductor Mp3 hay música que pocos conocen. Me gusta escribir y bailar. Sé cocinar porque amo la comida, sé bailar porque amo la música. Sé tocar guitarra pero no lo suficientemente bien. Nunca he trabajado y mis amigos me molestan por eso, es que no entienden que no me preocupa el dinero, y que por algo estudio periodismo.

Conozco Chile de Arica a Chiloé y un par de lugares de Argentina. En mis tiempos de joven deportista me dediqué al Tae kwon do y al Basquetbol, hoy al cigarrillo y a las fiestas.

La enseñanza media la pasé en el colegio Carmela Carvajal, aún no sé como la pasé, pero lo hice.

Me asustan las abejas y las mentiras. Suelo tener muchas pesadillas, y lo peor es que siempre me acuerdo de ellas. Me tiño el pelo desde los catorce años, porque no me gusta mi color natural. Tengo una perra llamada luna desde hace diez años, es para mí como mi sexta hermana.

Actualmente, me dedico a ser una estudiante de periodismo frustrada. Ni siquiera me gusta ver noticias, ni estoy segura de querer informarlas tampoco. Apelo al Nuevo periodismo y a sus complicaciones literarias. Me gusta la música, la comida y escribir, es lo único claro que tengo.

[ Trabajo para ayudantía de Taller de Crónica & Reportaje]


son marca puma

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Amo mis nuevas zapatillas & amo a mis “mejores” amigas.
Mis zapatillas son las mejores del condado, mis amigas no.
Sin embargo, sigo amando a mis amigas porque no son perfectas como mis zapatillas.

Esa es la esencia, es ese el argumento con el cual comienzo mi tesis sentimental.Y no quiero elucidarlo porque claro está: Yo tampoco soy perfecta.
Pero a veces, las imperfecciones suelen ser queribles, algo tiernas y poco pertinentes.Por eso quiero a mis amigas y supongo ellas a mí [o al menos eso me han hecho creer durante siete años].

Hace un año cambié, hace dos semanas re-cambié y hace 2 dias volví a cambiar.
Soy un camaleón de las esperanzas y desesperanzas,y hoy prometo no intentar cambiar por nada ni por nadie.No quiero ser algo que no soy,menos una marioneta de tu obra teatral a la cual puedes moder con tus dientes filudos y cortarle los hilos dorados cuando quieres.Alguna vez estuve dispuesta … sí,es verdad.Alguna vez quise ser como tú y manejar mis propios hilos, también es verdad.

Pero hoy no, ni aunque me pagaran con juegos de play station, ni aunque fueras la última persona en el mundo que pudiera donarme un riñón.No quiero ser parte de ti, ni de lo que te rodea, porque pareciera que te ensucias más que el aire de Santiago y la ciudad de México juntos.

Y hoy te digo, que no creo en tus cursilerías,y para variar, nunca las creí. Porque nunca conceptué un “terminemos”, un “volvamos” o un “lo siento, estaba ebrix”.Porque tu conoces a esta marioneta de pies a cabeza, y la golpeaste dos veces en su talón de Aquiles, en lo imperdonable, en lo-que-no-se-puede-nombrar. Dejaste una barrera de alta tensión entre mis razones de vivir y mi vida.Ahora ya no tengo razones porque me las infectaste.Ya ni las reconozco.No se parecen ni un poco a las que alguna vez me inspiraron confianza a ojos cerrados.Esa confianza se esfumó y te la llevaste tú. Junto con tu contaminación ambiental.

En fin, esas son las últimas palabras que te dedicaré en mi corta vida.
Espero que te sobren,porque no percibo más de mi tiempo dedicándolo a ti.

Gracias por ser mucho & nadie en poco tiempo.& no olvides qué …








Amo mis zapatillas nuevas.

ATTE.
Valentina [ La serpentina ]